Continuamos con nuestra serie de entradas dedicadas para todos aquellos que tengáis pensado realizar un entrenamiento para participar en una prueba ciclista, para que intentéis conseguir los mejores resultados personales posibles y sobre todo, para que vayáis seguros y disfrutando en todo momento del evento.
Entrenamiento de descensos
Si el evento cuenta con pendientes, además de subirlas, tendréis que bajarlas y no todas las bajadas son sencillas, algunas son muy técnicas y otras bastante más asequibles, pero todas ellas deben ser realizadas con sumo cuidado; a nadie le gusta caerse de la bicicleta a alta velocidad.
Por esa razón es muy importante adquirir experiencia en descenso, para perder el miedo y poder aprovechar siempre el mejor trazado, sin olvidarse de la seguridad (colocación de pedales, uso de freno, etc.)
Elección de bicicleta y componentes
Si se tiene más de una bicicleta se debe elegir aquella que mejor se adapte a las condiciones del terreno de la ruta y a las condiciones climáticas (de poco vale llevar una llanta lenticular en una zona de alta montaña) Cambios, sillín, manillar, ruedas… todo debe estar seleccionado y testeado para el día de la prueba.
Preparación de la bicicleta
Una vez elegida la bicicleta y sus componentes, hay que prepararla para la prueba. Limpiarla, hacerle una revisión mecánica para asegurarnos de que todo está bien, comprobar los cables de freno, el estado de las gomas y los radios, el sistema de cambios e incluso engrasar bien la cadena, nos permitirá obtener el mejor rendimiento de la bicicleta.
Reparaciones
Aunque no suele ocurrir en todos los eventos, puede que en cierto momento tengamos que enfrentarnos a un pinchazo, una salida de cadena, etc. Debemos saber cómo resolver estos problemas mecánicos para así no perder demasiado tiempo. Razón por la cual, hay que entrenar para que cualquier contratiempo mecánico no suponga el abandono de la prueba para la que tanto tiempo nos llevamos preparando.
Alimentación
Si es una salida en bicicleta con amigos, puede que no sea demasiado importante, pero si es una prueba en la que participan muchos ciclistas, seguro que todo el mundo irá bien preparado y otra forma de hacerlo es con la alimentación.
Tener un buen tono físico es importante, especialmente de cara a una prueba ciclista, por lo que nunca está de más que unas semanas antes tengamos un plan de alimentación especialmente diseñado para tal fin. Podemos recibir asesoramiento de nuestro monitor de gimnasio o de un nutricionista deportivo, quien se encargará de recomendarnos los mejores alimentos que ayudarán que nuestro cuerpo tenga energía suficiente como para afrontar el esfuerzo que supone la prueba.
Aún nos quedan unos cuantos consejos más acerca de prepararse para un evento ciclista, especialmente si se trata del primero en el que vayáis a participar, por lo que os invitamos a continuar con nosotros en posteriores entradas.
