En anteriores entradas hemos podido ver algunos consejos que resultarán de gran utilidad para aquellas personas que quieren comenzar a tomarse más en serio el mundo del ciclismo y quieren comenzar a participar en alguna prueba ciclista. En esta entrada continuamos ofreciéndoos algunos tips con el objetivo de que podáis prepararos para las carreras a las que queráis participar.
Controlar la emoción
Por todos es sabido que cuando se comienza a hacer algo, siempre se hace con mucha ilusión y ganas, pero en el ciclismo ocurre como en todos los aspectos de la sociedad, las prisas no son buenas. Por mucha emoción y ganas de hacerlo bien que tengamos hay que aprender a controlarse y no salir pedaleando al máximo, hay que dosificarse y sobre todo haberse preparado para saber cómo hacerlo, conocer los límites de cada uno y así poder tener un buen papel en la prueba a realizar.
Hay que controlar la velocidad, el ritmo cardiaco y muchos otros aspectos, no hay que arriesgar para intentar mantenerse en cabeza el máximo tiempo posible y mucho menos en los primeros kilómetros de la prueba.
Encontrar el grupo adecuado
Volviendo a la preparación para el evento, una de las mejores formas para prepararse es encontrar un grupo que se tenga más nivel o al menos el mismo que nosotros, con los que poder ir progresando poco a poco y recibiendo consejos de las personas más experimentadas, que también nos resultará de gran utilidad.
Conocer nuestros límites
Esto es algo muy importante porque sólo nosotros sabemos hasta dónde podemos llegar, cuáles son nuestros límites. Con el entrenamiento iremos mejorando marcas, obteniendo más resistencia y adquiriendo una mejor forma física que nos resultará de mucha utilidad de cara al día de la carrera. Nunca debemos forzarnos al límite, el cuerpo se irá adaptando poco a poco a los nuevos esfuerzos, pero éstos deben ser realizados de manera paulatina.
Uso del GPS
Nunca está de más el uso de un GPS a la hora de entrenar o algo más completo como un dispositivo que además de GPS tenga contador de kilómetros realizados, ritmo cardiaco y todos esos datos que nos permitirán ir rebajándolos a medida que vamos entrenando más a fondo. Además, con el GPS podremos seguir sin problema la ruta de la carrera con mucho tiempo de antelación para ir preparándonos para ella y conocer a la perfección el terreno.
Cuidar la alimentación
La comida no es algo que debamos dejar a la ligera y si sabemos que tenemos una carrera dentro de cierto tiempo, hay que acostumbrar al cuerpo, proporcionándole los nutrientes necesarios para afrontar determinada distancia, para realizar muchos esfuerzos en caso de que la prueba tenga puertos de montaña o grandes desniveles, etc. Un nutricionista podría ayudarnos para obtener el mejor rendimiento de la comida. Con lo que en unas cuantas semanas tendremos el cuerpo acostumbrado a comer para competición, algo que nos lo agradecerá.