La seguridad es un aspecto muy importante siempre que se haga cualquier actividad deportiva, especialmente aquellas en las que existe la posibilidad de tener un accidente de diversas consideraciones, como por ejemplo una caída, de la cual no se pueden prever los daños o si podrá llegar a haberos. Por ello hay que extremar las precauciones utilizando todos los dispositivos de seguridad que estén al alcance de nuestra mano, como cascos, guantes, gafas y algo muy importante que debemos tener muy presente siempre, el sentido común.
Siempre es preferible que en los entrenos vayamos acompañados, no solo para hacer más llevadera una salida sino para que en caso de accidente haya alguien que pueda auxiliarnos, aunque no siempre se puede salir con compañeros, ni todo el mundo tiene nuestro horario ni nuestros días de descanso, por ejemplo.
Pero ello no debe suponer un lastre para que disfrutemos del ciclismo, tanto si es una escapada de una hora como si se tiene previsto pasar varias horas sobre el sillín, la precaución debe ser nuestra mejor compañera en estos casos y también la tecnología, la cual puede llegar a ser de vital importancia.
En estos momentos tan tecnológicos en los que nos encontramos, hay un gran número de propuestas que pueden aumentar nuestra seguridad cuando salimos a la carretera y una de ellas viene de la mano de los teléfonos móviles, algo que no es precisamente nuevo pero que cada vez está más extendido, los códigos QR o BIDI.
¿Qué son los códigos QR?
Se trata de un sistema que nos permite almacenar información en una matriz de puntos o código de barras bidimensional de última generación. Gracias a la ayuda de un teléfono o dispositivo móvil que cuente con un lector de estos códigos, podremos conocer qué información hay almacenada en el código, lo que puede ser de gran ayuda en caso de un accidente dado que se pueden incluir infinidad de datos de gran importancia en caso de accidente.
En Internet hay infinidad de generadores de estos códigos en los que podemos incluir información relevante como el nombre, lugar de residencia, teléfono al que hay que llamar en caso de algún problema, si se es alérgico a alguna medicina y diferentes datos que sean de utilidad para un equipo médico en caso de accidente.
Hoy en día su uso está muy extendido actualmente, aunque no todo el mundo los lleva. Normalmente se suelen llevar impresos y pegados en los cascos. Lo que hay que hacer es acceder a una web generadora de estos códigos, imprimir la imagen obtenida sobre un papel adhesivo, recortarlo y pegarlo. En caso de accidente y si quedamos inconscientes, el equipo médico tendrá una referencia de datos de gran importancia con lo que se podrá evitar la administración de un medicamento al que somos alérgicos o si tenemos algún que otro problema físico de importancia.
Hoy en día prácticamente todos los teléfonos de última generación cuentan con capacidad para interpretar estos datos. Tan solo hay que utilizar la cámara con la que cuentan y enfocar al código; el propio software se encargará de “traducirlo” y ofrecernos la información en modo de texto legible para acceder a la información que se haya incluido. Aunque es raro el teléfono inteligente que no cuente de serie con un programa de estas características, siempre podremos descargar este software, el cual es completamente gratuito.
¿Qué datos debemos incluir?
Es importante que incluyamos datos de valor que puedan resultar de ayuda en caso de que tengamos un accidente, para que el equipo médico tenga toda la información necesaria a la que atenerse en caso de que lleguemos a necesitar una transfusión de sangre, la administración (o no) de determinado medicamento o cualquier otro aspecto que resulte de interés, es decir:
- Nombre y edad.
- Dirección de residencia.
- Teléfono al que se puede llamar en caso de accidente
- Grupo sanguíneo.
- Posibles alergias a medicamentos.
- Información médica de importancia (lesiones anteriores, asma, etc.)
Estos datos son de vital importancia para un equipo médico en caso de accidente, aunque hay que tener en cuenta que aunque pueden meterse muchos datos, siempre será más recomendable ser lo más precisos posibles, porque si se almacenan demasiados datos, puede que un dispositivo móvil no tenga capacidad para leerlo o tarde demasiado. Por esa razón se recomienda ofrecer siempre la información más relevante en el menor espacio posible, exactamente en 160 caracteres.
Seguro que muchos de vosotros y vosotras ya lo conocéis, pero como habéis podido ver, se trata de un formidable aliado que aunque esperamos que nunca se tenga que llegar a utilizar, no debemos descuidar de llevarlo con nosotros, bien en el casco o en la bicicleta, pero siempre en un lugar muy visible, pudiendo llegar a convertirse en uno de los mejores aliados de nuestra seguridad en la carretera.
